¿Quieres cambiar el grifo de tu baño? Ten en cuenta que hacer la instalación de fontanería de un baño es un proyecto desafiante para el que no todo el mundo está preparado. Por ello, antes de realizar esta tarea es muy importante que tengas en cuenta una serie de principios básicos para poder llevarla a cabo.
1. No confundir nunca presión con velocidad.
La presión es de medición nunca de sensación. Por lo tanto, cuando alguien dice “el agua sale con mucha presión” realmente está diciendo que sale a bastante velocidad. Un ejemplo: si estamos regando un jardín con una manguera simple y le ponemos el dedo encima estrechando esta goma, el agua llegará más lejos de lo que hace sin apretarle. Lo que hemos hecho es reducir el paso del agua pero como la presión es la misma, esta agua alcanza más velocidad y hace que llegue más lejos.
2. La presión debe ser medida en dinámica nunca en estática.
Cuando se dice “tengo 5 kilogramos de presión”, ¿es con todos los grifos parados o con 1, 2 ó 3 en marcha? La presión que interesa es la dinámica, esto es, con el agua saliendo.
3. La velocidad máxima del agua debe ser de 2 metros / sg.
Una velocidad por encima de ésta puede provocar ruidos en las canalizaciones así como el consabido “golpe de ariete” (al cerrar el grifo, las tuberías retumban). Nuestros cartuchos y monturas de discos cerámicos, presentan una forma de cierre gradual por lo que son de los mejores a la hora de limitar este golpe de ariete.
4. Para evitar los ruidos ambientales que pueden ser debidos a un exceso de presión, es aconsejable introducir en el circuito un reductor de presión.
5. Un bar es igual a un Kg.
A veces se dicen bares, a veces kilos. Es lo mismo.
6. Es normal que haya una diferencia entre la presión del ACS (Agua Caliente Sanitaria) y el AFS (Agua Fría Sanitaria).
Excepto en instalaciones con acumulador o sistema central ya que, al pasar el agua por el calentador, este tránsito hace que el agua pierda fuerza.
7. Las instalaciones habituales de nuestros domicilios suelen tener contadores de 3,6 m3/hora.
En pisos con varios cuartos de baño, instalaciones complejas de cabinas de ducha o con muchos puntos de consumo simultáneos, se tendría que calcular el consumo y acudir a la compañía para una ampliación del mismo.
8. Una instalación particular nunca debería tener al ACS por encima de los 55º.
Cuando el agua sobrepasa los 58º, la polaridad de la cal se invierte convirtiéndose en agresiva con el consiguiente problema de deposiciones, desgaste prematuro de componentes, etc.
9. Una termostática básica necesita una fuente de agua caliente de, al menos, 15.400 Kcal/hora.
Para ir seguro, se tendría que aconsejar tener por lo menos, una caldera o calentador de 13 litros/min. Los acumuladores son perfectos para las termostáticas.
10. ¿Qué significa que un calentador sea de X litros?
Cuando se dice esto es que ese calentador tiene la capacidad de coger X litros cada minuto y hacer subir su temperatura 25ºC en ese periodo de tiempo.
11. Las termostáticas necesitan un salto térmico.
Esto es, si queremos el agua a 45º C, por ejemplo, tenemos que asegurar que el agua caliente llegue por lo menos a 50º C. Es decir, el salto térmico debe ser de 5º C.
12. Una termostática, por concepto, se bloquea si no le llega AFS o le llega muy poca.
Esto es así porque el termoelemento busca la mezcla y si sólo le llega caliente, irá abriendo cada vez más la fría y a su vez, cerrando a la caliente. Sólo cuando se le proporcione otra vez AFS, volverá a hacer la mezcla.
13. El ACS siempre por la izquierda y el AFS por la derecha.
Esto es una ley para todo y más para las termostáticas ya que de no ser así, no realizarán la mezcla y pasarán de dar agua muy fría o muy caliente.
14. Es condición necesaria que los filtros se pongan en los racores de entrada de las termostáticas para evitar problemas de funcionamiento.
Estos consejos pueden ayudar, pero si realmente necesita un profesional de fontanería contacte con Bisermax, tenemos a los mejores,