La preocupación de la sociedad por la sostenibilidad y el medio ambiente ha influido en las decisiones de los consumidores los cuales apuestan cada vez por materiales naturales con menor huella de carbono, como la madera.
¿Has notado que las construcciones con madera han aumentado? En los últimos años, la madera ha ido ganando más importancia como material de construcción gracias a sus propiedades intrínsecas que proporcionan ventajas a nivel ambiental, económico y social.
En la historia de la humanidad y el desarrollo de la civilización, la madera ha jugado un papel importante, siendo el material por excelencia, el más antiguo utilizado por el hombre. Aunque ha sido sustituida por materiales de la “nueva construcción” durante muchos años, actualmente se encuentra en una época de progreso, debido a los avances tecnológicos que aumentan la seguridad y eficiencia de la madera como material de construcción. Y es que, la madera es un material de gran flexibilidad, bajo peso, resistente al fuego que, además, reduce los tiempos de construcción y de costes. Así lo ha demostrado durante centenarios.
Pero… ¿qué hace que la madera sea un material para la construcción con multitud de ventajas? Estos son algunos de sus aspectos más destacados.
Frente a otros materiales de construcción, la madera como material de construcción tiene la oportunidad de recuperar la presencia y propiciar un proceso cambiante de mejora de la edificación bajo estándares de sostenibilidad. Además, ofrece una gran cantidad de propiedades que lo convierten en un producto premium.
Excelente aislante térmico y acústico
El aislamiento, principalmente térmico, es un aspecto muy importante para lograr la reducción de la energía utilizada en la climatización de edificios. Y es que, la madera, por su composición, es un excelente aislante natural que puede reducir la cantidad de energía utilizada para la climatización de un espacio. Esto se debe a que posee unas estupendas condiciones de aislante térmico y absorción acústica. Este material, gracias a sus las fibras que forman su estructura celular, no acumula calor. De ahí, que la madera sea tan buena como aislante térmico y nos ayude en el ahorro de energía, ya que no necesita regular tanto la temperatura del hogar.
Durabilidad
Con una construcción de madera conseguimos mayor durabilidad. Esto se debe principalmente a los estándares de construcción de madera y la calidad de los materiales utilizados. Los tratamientos aprobados le permiten combatir la aparición de insectos y hongos.
Además, al contrario de lo que se suele pensar, la madera es un material duradero que nos proporciona estructuras durables. Ejemplos de esta durabilidad hay muchísimos, como por ejemplo edificios de hace cientos de años que están en perfecto estado, estructuras como puentes o embarcaciones, etc.
Resistencia
Puede soportar presión y tensión debido a su baja masa, baja densidad y resistencia mecánica. Y es que, la madera tiene buenas propiedades estructurales, es capaz de resistir tanto a la compresión como a la tracción que sufren las estructuras. Tiene una baja densidad, alta resistencia mecánica y es mucho más ligera que otros materiales. Tampoco se deshace cuando es sometida a golpes bruscos que afectarían a otros materiales.
Sostenible
La principal ventaja de la madera es que es un producto natural y 100% renovable, cuyo proceso de producción requiere menor consumo energético, aparte genera menos residuos, ya que no es un material toxico, ni produce olores ni vapores de origen químico. Además, utilizar madera ayuda a combatir el cambio climático y ayuda al mantenimiento de los bosques al minimizar el riesgo de plagas e incendios.
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