Las flores de interior son una opción fantástica para añadir vida, color y frescura a cualquier espacio cerrado. Sin embargo, cuidar de ellas puede ser un reto, ya que requieren condiciones específicas para prosperar. Aquí tienes algunos consejos útiles para mantener tus flores de interior saludables y vibrantes:
1. Selecciona las flores adecuadas para interior
No todas las plantas con flores son ideales para espacios interiores, ya que muchas necesitan luz solar directa y constante. Algunas de las especies de flores más adecuadas para interiores son:
- Orquídeas: Elegantes y disponibles en una gran variedad de colores, estas flores requieren luz indirecta y ambientes húmedos.
- Begonias: Prefieren la luz indirecta y tienen una variedad de colores brillantes, ideales para interiores.
- Violetas africanas: Estas flores pequeñas y coloridas son fáciles de cuidar y prosperan en la luz indirecta.
- Anthurium: Con flores rojas, rosas o blancas, esta planta es ideal para dar un toque tropical y es bastante resistente.
Investigar un poco sobre cada especie antes de comprarla te ayudará a asegurarte de que tienes las condiciones adecuadas para cada una.
2. Controla la cantidad de luz
La mayoría de las flores de interior necesitan luz indirecta para evitar que sus pétalos se quemen o sus hojas se decoloren. Colocarlas cerca de una ventana con una cortina que difumine la luz o en un espacio bien iluminado es lo ideal. Algunas flores como las orquídeas y las calas prefieren luz moderada, mientras que otras como las violetas africanas pueden adaptarse a luz baja.
3. Riego adecuado
Regar las flores de interior puede ser complicado, ya que el exceso de agua puede pudrir las raíces, mientras que la falta de agua las deshidrata. Aquí hay algunas pautas generales:
- Evita el exceso de agua: Es mejor dejar que el sustrato se seque un poco entre riegos. Para comprobarlo, introduce el dedo en la tierra; si sientes que está seca hasta unos 2 cm de profundidad, es momento de regar.
- Usa agua a temperatura ambiente: Las flores pueden resentirse si el agua está demasiado fría o caliente.
- Escoge macetas con buen drenaje: Las macetas con agujeros en la base permiten que el agua sobrante se drene y evitan que las raíces queden encharcadas.
4. Cuida la humedad del ambiente
Muchas flores de interior, como las orquídeas y los anturios, prefieren ambientes húmedos. Si el aire es muy seco, especialmente en invierno con la calefacción encendida, considera:
- Pulverizar las hojas y las flores con agua cada dos días para mantener la humedad (aunque evita rociar directamente las flores delicadas).
- Usar humidificadores cerca de tus plantas.
- Colocar las macetas sobre un plato con piedras y agua, de modo que el agua se evapore sin que la maceta toque directamente el líquido.
5. Elige un sustrato adecuado
El sustrato es clave para el crecimiento de las flores de interior, ya que cada tipo de planta requiere distintas propiedades en el suelo. Algunos puntos a considerar:
- Sustrato para orquídeas: Es especial, porque requiere una mezcla aireada que permita la ventilación de las raíces.
- Sustrato universal: Funciona para la mayoría de las plantas de interior, aunque se puede mezclar con un poco de arena para mejorar el drenaje.
- Agrega fertilizante durante la primavera y el verano, siguiendo las indicaciones de la planta y evitando el exceso para no quemar las raíces.
6. Control de temperatura y ventilación
Las flores de interior son sensibles a los cambios bruscos de temperatura. La mayoría prefieren temperaturas moderadas:
- Evita corrientes de aire que pueden dañar los pétalos y hojas delicadas.
- Mantén una temperatura constante de entre 15 y 25°C, ideal para la mayoría de flores de interior.
- Ventilación: Asegúrate de que el espacio esté bien ventilado, pero sin exponerlas a corrientes frías o calientes.
7. Controla las plagas
Aunque se trate de flores de interior, pueden aparecer plagas como ácaros, pulgones y cochinillas. Algunas recomendaciones:
- Revisa regularmente las hojas y flores para detectar cualquier signo de plagas.
- Limpia las hojas con un paño húmedo, o utiliza una mezcla de agua y jabón suave para mantenerlas sanas.
- Usa insecticidas naturales como el aceite de neem o soluciones caseras de ajo y agua, que son suaves para las plantas pero efectivas para las plagas.
8. Mantén un horario de poda
La poda regular de tus flores de interior ayuda a eliminar las partes muertas o dañadas y fomenta un crecimiento sano. Aquí te indico algunos pasos para podarlas:
- Corta las flores marchitas para que la planta concentre su energía en las partes sanas.
- Elimina hojas secas o amarillentas para mejorar la apariencia y salud de la planta.
- Usa tijeras de podar limpias para evitar la transmisión de enfermedades entre plantas.
9. Dale tiempo para adaptarse
Cuando lleves una flor nueva al interior de tu casa, dale tiempo para adaptarse al cambio de condiciones. Evita cambiarla de lugar constantemente y permite que se aclimate a su nuevo entorno.
En Bisermax, puedes contratar a los mejores profesionales para tus flores, plantas, jardines, etc…, contacta con nosotros.